En clase, esta semana continumos con el tercer taller y hemos visualizado una conferencia de
Marta Peirano en TED (Por qué me vigilan, si no soy nadie), igualmente vimos otra charla en TED de Glenn Greenwald. Comenzaré con Peirano, M. Quien con su discurso pretende concienciarnos
para que tengamos cuidado con nuestros datos porque según, no valoramos la
información que generamos cada día, despreciamos su valor y por último, creemos que nuestro problema es la NASA. Sin embargo
somos nosotros los tenemos todo lo que
ellos necesitan en el móvil y el problema es que el gobierno y otras
agencias que tengan esa información la pueden usar en nuestra contra o
para mantenernos vigilados. Pero no solo
nos vigilan u obtienen nuestros datos a través de nuestros teléfonos, sino también
de las cámaras que hay en las calles, radares, tarjetas (de bus, visa, DNI, de
puntos, etc.). Como ella dice, todo lo
que hacemos queda registrado en una base de datos que obtiene información a
través de Nuestros móviles. Pero no sólo eso, sino que además cuando
aceptamos tarjetas de los supermercados o tiendas, les estamos ofreciendo
nuestros datos e información, a cambio de un regalo que comparado con lo que
pueden hacer con nuestra información no vale nada. Pero lo peor de todo
esto, es que esos datos que están en las redes, las empresas los usan para
venderlos y ganar dinero
Por ejemplo, en un censo que incluía religiones realizado por Holanda, su objetivo era cuantas
cuántas personas habían y así saber que dinero dar a cada iglesia. Pero los
alemanes, utilizaron esa base de datos para el exterminio de los judíos y si
esta no hubiera existido los acontecimientos hubieran sido diferentes. Es por esta y otras razones que Peirano, nos
recomienda que usemos criptografía en nuestros móviles, ordenadores,
comunicaciones y pensar mejor cuando nos ofrezcan tarjetas de puntos.
Por otro lado Greenwald,
en su charla enfocada a la privacidad, dice que hay cosas que los individuos hacemos cuando pensamos que
nadie nos está mirando, pero que no haríamos si supiéramos que nos
observan. Su trabajo se centra en
importancia de la privacidad debido a las
revelaciones de Edward Snowden, que dice que Estados Unidos y sus socios, sin
que el resto del mundo se entere, han
hecho de internet una herramienta para
la vigilancia masiva e indiscriminada.
Aun así hay personas que opinan que esta vigilancia no hace ningún daño y que
solo afecta a las personas malas y no a las buenas que no tienen por qué
preocuparse de que el gobierno las vigile. Sin embargo, estas personas no son
coherentes con sus actos, ya que toman medidas de seguridad para estar protegidos,
pues usan contraseñas y llaves.
Un ejemplo de este tipo de personas que se contradicen es Mark Zuckerberg, director de Facebook, quien en una entrevista
dijo que la privacidad ya no era una “norma
social”, pero luego se compró una casa y las de alrededor para proteger su
privacidad. La conclusión de Greenwald
es que todos independientemente de si somos malos o buenos tenemos algo que
esconder y que realmente si valoramos la privacidad aunque literalmente lo
neguemos.
Siempre hemos estado vigilados porque esto controla nuestros
actos, si una persona sabe que es observada se comporta de forma diferente. La
primera herramienta que se utilizo con este fin, fue el panóptico en las cárceles,
las cuales eran construidas de modo que toda su parte interior se pudiera ver
desde un solo punto. Pero los prisioneros que estaban fuera de ese punto no podían
saber si les estaban observando o no porque no podían ver el interior. Esto ayudaba a que obedecieran y cumplieran
las normas. Este medio de control eficaz se ha extendido a otros ámbitos para el
control social en nuestra sociedad, pues nos limita y nos condiciona.
En fin, la vigilancia va en contra de nuestro derecho a la
libertad y esto es algo que no debemos permitir. Estoy muy de acuerdo con lo que
dicen tanto Peirano como Greenwald y además, escucharles a ambos me ha ayudado
para darme cuenta de cuántos datos ofrecemos y generamos de forma inconsciente, así como de aquellos medios que se utilizan o han sido utilizado para controlarnos. Antes la religión se aprovechaba de la fe de las personas y utilizaban a Dios para que cumplieran con los mandamientos. La gente tenía miedo y dejaban de hacer cosas por miedo a ser castigados por Dios o por no poder ir al cielo si morían.
No se me hubiera ocurrido que con una tarjeta de puntos pudieran tener acceso a
mis datos. Gracias a ello, soy más cuidadosa. Hace unos días fui a Garbera y me ofrecieron
una tarjeta para obtener descuentos en algunas tiendas del centro comercial,
inmediatamente recordé las conferencias de estas dos personas y la rechacé. También
tengo que decir que uso contraseñas pero que no sabía que se podían usar
criptogramas para estar mejor protegida. Por otra parte, soy de las que pienso
que mi privacidad es un derecho de lo seres humano y que nadie debe negarme ese
derecho por mucho poder que tenga. Espero a partir de ahora tomar mediadas que
me permitan ejercer ese derecho y tener más cuidado mis datos.
Comentarios
Publicar un comentario